Un sábado 28 de mayo de 2011, FC Barcelona, al mando de Joseph Guardiola se consagraba campeón de UEFA Champions League 2010-11, derrotando a Manchester United, que era dirigido en ese entonces por Sir Alex Ferguson, ante la mirada atónita de 90 mil espectadores en Wembey, deleitándose con el gran juego mostrado por el cuadro 'blaugrana' de inicio a fin del encuentro.
Los 'azulgranas' llegaron a la final tras vencer a Arsenal en octavos, 4-3 en el global, a Shakhtar Donestk, 6-1 resultado global en cuartos, y derrotar a su clásico rival, Real Madrid en las semifinales, tras ganar 2-0 en el Bernabéu e igualar 1-1 en Camp Nou. Mientras que, los 'red devils' vencieron a Marsella en octavos, Chelsea en cuartos, y al sorprendente Schalke 04 de Jefferson Farfán, Manuel Neuer, Draxler, Raúl Gonzáles y Klaas Jan Huntelaar en semifinales.
Joseph Guardiola preparó su mejor equipo, con una oncena clásica en la historia de Barcelona, el 1-4-3-3 con; Víctor Valdés en el arco, Javier Mascherano, Gerard Piqué, Dani Alves y Abidal en defensa, Sergio Busquets, Xavi Hernández y Andrés Iniesta en el mediocampo, más arriba otro tridente clásico con Pedro, David 'el guaje' Villa y Lionel Messi. 'Pep' quería su segunda 'orejona' como dt, en 2009 la consiguió tras vencer al mismo United. Equipazo no.
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Ferguson mandó un once de antología con; Van der Sar en portería, Ferdinand, Vidic, Fabio y Evra en defensa, Valencia, Carrick, Ryan Gyggs y Ji-Sung Park en la volante inglesa, Javier Hernández y el histórico Wayne Rooney comandaban el ataque. Un 1-4-4-2 para buscar la cuarta corona al igual que los 'culés', 'Fergie' iba por su tercera Champions con United, antes la había ganado en 1999 con Beckham y Solskjaer como figuras, y en 2008 con Cristiano Ronaldo, Rooney y Tévez como estrellas.
Pedro abrió la cuenta, sin embargo Rooney igualaba el marcador, corrían los minutos y Barcelona fiel a su estilo, el tiki-taka, asfixiando las tibias salidas del United y contragolpeando de manera excelente. Un partido que marcó a muchos hinchas del fútbol, jóvenes y chicos, 'barza' tocaba y gustaba, transiciones de defensa a ataque rápidas, apoyo colectivo, como dicen los brasileños el 'jogo bonito' y para otros la escuela holandesa implantada por Johan Cruyff en su mejor expresión y que tomó años en plasmar resultados.
Messi ponía el 2-1 con un golazo fuera del área, sumando decimo segundo gol en el certamen europeo. David Villa marcaba el 3-1 final con otro tanto fuera del área, decretando el triunfo y el cuarto título de Champions League para Barcelona, equipo que marcó época en deporte rey, haciendo ver una forma buena y bonita de jugar al fútbol con intensidad de primer nivel.
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